Vaya por delante que no suelo tener buenas experiencias con los libros de relatos. Así a bote pronto recuerdo lecturas fallidas de Borges, Rulfo o de Las mil y una noches. Trilogía en Nueva York (1985-86) de Paul Auster es un libro con tres historias, que por su longitud quizás no podríamos calificar exactamente de relatos, pero que a mí me han causado el mismo efecto.Tres novelas negras en una, tres novelas negras en el Nueva York de los 80 que están planteadas para romper con los estándares del género (para empezar, no tratan sobre asesinatos) y que incluyen grandes dosis de surrealismo y situaciones absurdas, inverosímiles y tristes. La primera no me gustó nada. La segunda y, sobre todo, la tercera tenían su punto interesante, más que nada por lo chocante en cuanto al tipo de historia y manera de escribirla (parece ser que teníamos a un Paul Auster muy fresco), pero no recuerdo haber tirado ningún petardo al finalizar el libro. Será el Efecto Relato...
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1 comentario:
Adoro los libros de relatos, me resultan fáciles de leer y ágiles, aunque he tenido muy buenas experiencias con este tipo de libros (Historias Extraordinarias y Relatos de lo Inesperado de Roald Dahl o Pequeños Cuentos Misóginos y Los Cadáveres Exquisitos de Patricia Highsmith) también reconozco que los hay pesados como Relatos que me asustaron de Alfred Hitchcock, que llevo dos meses para leerlo y salvo algunas historias, las demás no asustan ni a un niño pequeño.
Este libro que comentas me ha parecido interesante a primera vista, pero si dices que sus situaciones resultan inverosímiles y absurdas, no lo leeré, ya tuve bastante con el final de En el nombre del cerdo, que no había por donde cogerlo.
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